HAY PALABRAS QUE SON PUERTAS SECRETAS

HAY PALABRAS QUE SON PUERTAS SECRETAS

(Sab 3)

       Hay veces, Señor, que leo tu Palabra y no caigo en la cuenta,

hay veces que no me entero cuando hablas aunque quiero estar atenta,

otras veces releo y releo y el cansancio no me deja,

hay textos que escucho y la memoria recuerda,

hay algunos que en las clases estudiamos y preguntas nos plantean,

sin embargo otros ni siquiera me resuenan,

y son textos que he leído varias veces cuando estaba en la escuela.

         Creo que es por poner el acento en Abraham y su única descendencia,

ya que el otro día descubrí o mejor dicho me di cuenta que al morir Sara tuvo él otra pareja.

         Cómo ves la Palabra siempre va de sorpresa en sorpresa

¡cuántos hechos! ¡cuántas historias de la vida verdadera!.

Nos habla continuamente de entrega,

nos habla de sacrificios y ofrendas muy sinceras,

nos habla de familias y de continuas parejas,

nos habla de hermanos, de envidias y de herencias,

y de padres que sienten de sus hijos las ausencias,

nos habla de las mentiras y de los hombre en guerra,

nos habla de los distintos dioses que existen en nuestra tierra,

y de la fidelidad de quienes reconocen a Yahvé y su Presencia.

         ¡Cuánto nos dice la Biblia!, ¡cuánta vida secreta!,

¡cuántas palabras que nos llenan de semilla verdadera!,

sin embargo algunos creen que son palabras, simplemente palabras muertas.

         Si pudiera profundizar aunque sea en una de ellas

porque alguna vez ya me han abierto su puerta,

cualquiera de esas palabras son unas puertas secretas.

         Dios quiera que su Espíritu nos conceda viajar a su profundidad más serena.

¡cuánta enseñanza nos llena de gracia plena!,

¡cuánta misericordia derrochada en el alma que se le entrega!,

¡cuánto perdón sanando heridas viejas!,

¡cuánta bondad derramada sobre nuestra inteligencia!,

¡cuántas personas en su engaño descubiertas!,

¡cuánta luz en medio de la ceguera!.

         ¡Qué alegría Señor por dejarme tu puerta abierta!,

por darme tu Sabiduría y ser Ella mi Maestra,

por enseñarme que a las almas de los justos no llegará la tormenta

aunque algunos insensatos piensen que ya están muertas

y proclamen por los vientos que era falsa su entrega.

         Pero Dios en su interior les mantiene su promesa

y la paz continuamente les llena.

         Qué difícil Señor es dar el salto a la vida verdadera,

qué difícil es ver más allá de lo que nuestros ojos presencian,

qué difícil es mantener la esperanza si no es cierta

y qué fácil confiar en el Dios de la promesa,

en el Dios que siempre has sentido cerca,

en el Dios que ha roto todas nuestras cadenas,

qué fácil es confiar aunque la duda aparezca

cuando tienes la experiencia del Dios que te guía y a la vez te vela,

cuando tienes la experiencia de sentirte en su Presencia,

cuando experimentas que sostiene tu existencia.

         ¡Si pudiéramos descubrir la vida que Tú encierras!

pero es un don, es un don que te invita a tener tu mirada siempre atenta,

que te invita a buscar y tener el alma inquieta,

y digo bien, el alma inquieta que no es nerviosa, ni irritada, ni rompiendo cuanto llega.

         ¡Qué bonito es viajar por esa puerta secreta!,

¡qué bonito cuando te invita a bajar y profundizar sin saber donde te lleva!,

¡qué grandioso pues aunque no ves el final el miedo no se te acerca!,

porque tu alma goza de todo lo que te enseña

y tu ser disfruta de cuanto, que te revela.

         Bendita sea tu Palabra por todo lo que me entrega:

nos habla de paraíso, de hombre y mujer unidos por una meta,

nos habla de la igualdad y complemento en la ofrenda,

nos habla de fidelidad y la cruz unida a ella,

nos habla de salvación y Quien es la paz sincera,

nos habla y nos dice que Ella es la Buena Nueva,

que Ella es el susurro que nuestra alma espera,

que Ella es la suavidad que nos consuela,

y que también es la belleza que siempre nos rodea,

que es quien nos da la mirada auténtica,

la voz que mantiene la esperanza y al corazón que lo alegra,

Ella es la protección de todo aquel que se le acerca,

y será para cualquier hombre el encuentro con el Cristo que le espera,

el encuentro con el Dios que ya le tiene la silla en la mesa puesta,

con el Dios que nos espera en la puerta,

con el Dios que nos abre sus puertas más secretas,

el encuentro con el Padre, el Hijo y el Espíritu que siempre se nos entregan,

el encuentro con el Dios Amor que la vida nos regenera,

con el Dios que restablece nuestra alianza eterna.

         Bendita sea tu Palabra que nos atrae y nos mantiene en su entraña más secreta.

         Hombres y mujeres acercaos a la Biblia y dejaos llevad por las palabras que leas.

  

                                                                                     Filotea

                                                                            Madrid 07 – 10 – 12

MARÍA ME SALUDA

MARÍA ME SALUDA

         Hoy es un saludo de bienvenida,

saludo de confianza y acogida,

saludo de serenidad y mano tendida,

saludo de firmeza porque me siento cogida.

         Al ver tus manos Madre me invitan a tenderte las mías,

invitación que en otros momentos yo no percibía,

invitación que me llena de seguridad junto con una sonrisa,

y tengo de fondo la persona que aquí me solicita,

y que quiere que siga bajo su protección divina,

San José, cambio de colegio más no de protector que me cuida,

es verdad que no apareces mucho en mis poesías,

pero estás ahí cuidando mi vida,

cuidando de toda mi familia.

         San José bendito que el sueño te revelaba la voluntad divina,

fortalece mi fe y mi entrega día a día.

         ¡Qué suerte tener tal compañía!,

¡qué suerte continuar en un colegio cuyo nombre me evoca tres años donde he vivido grandes maravillas,

gente que ha madurado, niños que han aprendido a descubrir tu semilla,

alumnos/as que son mejores personas a pesar de las riñas,

y otras con necesidades que se han sentido atendidas,

¡qué satisfacción al escuchar de una adolescente que a la graduación de su próximo curso me invita!,

de la gratitud de los jóvenes que tienen el alma limpia,

de la sencillez y sinceridad de las personas que han recibido semilla,

la semilla de la Palabra Divina,

semilla que ha levantado el ánimo cuando han estado caídas,

semillas en las personas de trato correcto y que a veces la fe no compartían,

pero que ahora al final reciben el don del Espíritu que yo les ofrecía.

         ¡Qué bonito descubrir en mi vida tantos frutos y tanta maravilla!.

No sé lo que me espera aquí en Madrid, Madre mía,

he visto gestos humanos que me tranquilizan,

nerviosismos que un poco me crispan,

abrazos sinceros de acogida

y alguna persona que piensa que estoy evaluando su vida,

su hacer, su trabajo, sus días

y cuando le pido alguna recomendación dice que no tiene y mueve los hombros de abajo hacia arriba,

quizás he venido en mala fecha o quizás tampoco está pasando buenos días,

cada uno somos tan diferentes, enséñame Madre a mirar más allá y a valorar todas las horas que estuvo conmigo sentada en la silla,

es mucho más tiempo que un gesto o una palabra no dicha.

         Gracias Madre por tenderme tus manos que agarran a las mía,

que sostienen mi fe, mi esperanza y levantan mi mirada hacia arriba,

¡qué gozo el Espíritu Santo que siempre me inspira!,

al que estoy consagrada por ser hija de María,

y a tus pies Madre mía, Jesús Eucaristía

quien guarda mi alma, mi paz y la mirada limpia,

y tu Madre Matilde en la puerta dándonos tu acogida,

las manos que arropan hacia sí a quien está desprotegida,

bendice a nuestras Hermanas mayores que han entregado su vida,

que han hecho las cosas como mejor lo sabían

y creyendo que así la misión para adelante salía.

         Bendice también Madre a nuestros bienhechores que suavizan las fatigas,

que siembran de colores las horas grises que tenemos cada día,

bendice Madre a la humanidad caída,

sobre todo a los que viven sin sentido y no les importa la vida.

         Gracias Madre por mis amigos y amigas con los que puedo contar, bromear, desahogarme y compartir la sonrisa,

a esos que aún diciéndoles barbaridades me hacen descubrir que mi vida es una maravilla,

         ¡Cuántos dones, cuánta gratuidad derramada en mi alma, en un desierto en el cual una vez pensé que nunca florecería!.

         ¡Qué gran cimiento la fe que me sostenía!,

¡qué gran cimiento cuando la comparto con las personas que lo necesitan!.

         Bendito seas Señor en los momentos de muerte y de vida,

en aquellos que duermo o estoy despierta y mi mente creativa,

en aquellos que sueño o están llenos de utopía,

bendito seas Señor, Trinidad Divina.

                                                                                             Filotea

                                                                                    Madrid a 01-07 – 12

LA OFRENDA DE MI VIDA EN LAS MANOS

LA OFRENDA DE MI VIDA EN LAS MANOS

       Hoy he venido al ensayo de mi Postulantado,

y al terminar y salir de la Iglesia siento que algo va cambiando,

y al pisar la calle mi mente va recordando.

         Regreso a mi casa y aunque algunas cosas he recogido experimento que también algo voy dejando,

dejo recuerdos, palabras, encuentros y pienso en proyectos que cuando adolescente había soñado.

         Es algo raro,

raro porque todo ello me ha forjado,

ha hilado mi vida, mi personalidad, mi espacio,

espacio en el que tantas veces he reservado,

espacio que he cuidado y mimado,

lugar que conoce mis secretos más privados.

         Pero no siento nostalgia, no sé, es algo raro

la inquietud, la ilusión, una llamada y unas manos que me están esperando,

una voz que me ha cautivado,

una mirada me ha enamorado,

un abrazo me ha atrapado.

         Abrazo que me hace libre y me va impulsando,

abrazo que me hace sensible hacia el necesitado,

abrazo que me lleva a un encuentro Eucarístico y Mariano,

que me lleva a una misión de discípula y a Él escucharlo,

que me lleva a estar con Él y a mi corazón ir educando.

         María Madre de la Iglesia aquí me tienes como hija, te consagro mis días y noches, mis dudas, mi amor y mis fallos,

te consagro lo que soy, lo que tengo, lo que dejo, mis pensamientos, mi corazón y mis labios.

         Hazlos mensajeros y dóciles a ti y al Espíritu Santo.

         Gracias a la Congregación que me acoge como miembro y al Dios Trinidad que siempre me ha amado.   

                                                                                FILOTEA

                                                                  Madrid 06 de Septiembre de 2012

ID MÁS ALLÁ DE LA BELLEZA, ID A LA VIDA

ID MÁS ALLÁ DE LA BELLEZA,

ID A LA VIDA

 

      Al entrar a la Catedral de la Almudena todo señala al Santísimo,

y aunque dentro de mí está la visita a Ella mis ojos siguen la flecha,

pero no puedo resistir subir a verla,

sacarle unas fotos y pronunciar dos letras,

luego he bajado y me he detenido ante una puerta,

puerta donde hay un letrero que dice: no fotos, aquí sólo se reza.

            He entrado y me ha impresionado la belleza,

belleza que muestran de la vida de Jesús varias escenas,

lugar que me habla de sacrificio para dejarlas perfectas,

el amarillo y el rojo sobresalen y expresan viveza,

en los ojos oscuros descubro una mezcla

pues no leo con claridad lo que manifiestan,

ya que algunos parecen tristes aunque sus rostros no hablan de tristeza,

sus rostros hablan de seriedad, quizás van más allá y nos señalan la sorpresa:

la adoración de los Magos y de una estrella,

la multiplicación de los panes y un niño a su izquierda,

de un hombre y el bálsamo de un samaritano que lo recupera,

todo esto está a mi derecha,

y en el centro el Santísimo que me espera,

y me hace caer en la cuenta,

me hace ir más allá de ese Sagrario de columna tan esbelta,

me hace caer en la cuenta de la Vida que está dentro y me espera.

            Y me dice: ve más allá de esos ojos que ven la luz de las lámparas que hablan de mi presencia.

            Es verdad Señor,¡cuánta riqueza externa!,

riqueza construida por las manos de los hombres y de su inteligencia,

sin embargo lo único valioso eres Tú, Tú eres la Vida, la Vida eterna,

¿De qué me vale tener oro si dentro estoy muerta?,

¿de qué me vale tener riqueza si ella no me lleva a tu presencia?,

¿de qué me vale tener bienes si con ellos la felicidad no me llega?.

            Concédeme Señor, gustad y ved que bueno es seguir tus huellas,

que bueno es seguir tu mirada que me lleva,

que bueno es dejarme guiar por tu voz y tu Espíritu que me rodea,

y esas manos de María que cada día me entrega,

esas manos que cada vez que las miro me invitan a cogerlas,

y me hace sentir su cercanía y fortaleza,

y dice que me acompaña en mi tarea,

en esa misión que va más allá de la Iglesia,

que mi fe está viva y que ella mantiene la llama encendida para que otros la vean.

            Y al lado izquierdo del Santísimo hay otras escenas,

y una de ellas representa a Adán y Eva,

y cómo no, la tentación cerca,

la serpiente, con largo cuerpo y grande su cabeza.

            ¡Ojala que lo verde del árbol despierte nuestra ceguera!,

porque el árbol no es lo malo ya que su sombra nos recrea.

            Señor enséñanos a discernir las distintas esencias,

enséñanos a mirar más allá de tantas capaz externas,

enséñanos a penetrar en esas miradas y desenmascarar las palabras que cosas buenas no ofrezcan.

            Sólo Tú, Señor, guía mis pasos para permanecer siempre a tu lado, junto a Ti, en tu Presencia.

Aquí me tienes en Madrid confiando en tu Espíritu, en San José que me proteja,

aquí me tienes, enséñame a unir las cosas que están heridas, e incluso medio deshechas,

enséñame y ayúdame a sacar lo mejor de mis alumnos y de la gente que me rodea.

            Madre de la Almudena, lléname de esa Paz que tus brazos llevan,

de esa Paz que el mundo está sedienta,

de esa Paz que es la Vida, la Vida de la Trinidad, que nos ama y nos habita llenándonos de su inmanencia.

            Santa María de la Almudena en tus manos encomiendo la misión que mi Congregación me entrega,

 en tus manos encomiendo a las personas que mi ser llenan,

a esos que están ahí y mantienen mi vida de entrega,

bendíceles cada día y se para ellos su estrella,

la Madre que les acompaña, concédeles tu presencia.

            Virgen de la Almudena, tú que estás en la Trinidad mantennos junto a ti sentándonos a tu vera.

Bendice a la humanidad caída manteniendo la esperanza y el amor cuya herida les mantiene en la ceguera

Madre, que creamos siempre en la vida aunque nuestros ojos y oídos no perciban la savia, el amor y la esencia,

La esencia del Dios que ha formado su ser en las entrañas maternas.

            Madre de la Almudena, Madre de la Iglesia

aquí tienes a tu hija agradecida y contenta,  

contenta y agradecida porque tus manos sostienen mi vida, mi ser y entrega.

            Gracias Madre por estar contigo y en este camino ser mi Madre, Amiga y Compañera.

            Bendito y alabado sea el Dios que me tiene siempre en su Presencia.

 

 

                                                                          Madrid 26 – 08 – 12

 

                                                                                                        Filotea